La cooperación en defensa entre Argentina e Italia se remonta a 1992 y ha sido robustecida por acuerdos sucesivos, incluyendo uno firmado en Roma el 12 de septiembre de 2016. Este lunes 10 de junio, el Ministro de Defensa argentino, Luis Petri, se dirigirá a Italia para negociar la compra del buque San Giorgio. Este encuentro bilateral con su homólogo italiano, Guido Crosetto, representa un paso crucial en el fortalecimiento de la flota de la Armada Argentina, bajo la administración de la Primera Ministra Giorgia Meloni.
Petri viajará sin comitiva, salvo por su responsable de prensa. Su agenda se desarrollará en el histórico Palacio del Ejército, situado en Piazza Venezia, Roma. Esta visita subraya la intención de Argentina de reestablecer su capacidad de asalto anfibio, una prioridad urgente para la Armada Argentina, que actualmente carece de un buque de despliegue adecuado para la Infantería de Marina.
La marina italiana está en proceso de desprogramar dos buques LPD de la clase San Giorgio, y Petri visitará el astillero para evaluar estas naves. Este potencial refuerzo es vital para los patrulleros oceánicos de la Armada Argentina, que necesitan mejorar su capacidad de vigilancia. Estos patrulleros, equipados con cubiertas de vuelo y hangares, carecen de helicópteros embarcados, lo que limita su operatividad.
En 2023, el exministro de Defensa, Jorge Taiana, firmó una carta de intención para la adquisición de ocho helicópteros Leonardo AW109, esenciales para la Armada Argentina y el Comando Conjunto Marítimo. La oferta de Leonardo incluye una atractiva financiación a través del Servicio de Seguros de Comercio Exterior (SACE), cubriendo el 100% de la compra, estimada en 90 millones de dólares, a pagar en 10 años con dos de gracia.
Este viaje de Petri es más que una negociación; es una estrategia para revitalizar y modernizar las capacidades operativas de la Armada Argentina, asegurando su preparación y eficiencia en un contexto geopolítico cada vez más desafiante.
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