El Presidente Javier Milei ha emitido una serie de medidas que marcan un cambio significativo en la administración de la flota presidencial, apuntando hacia una política de austeridad y eficiencia en el gasto público. En un movimiento inesperado, se ha ordenado la venta del avión presidencial Tango 04, junto con la transferencia del control operativo de toda la flota aérea de la Casa Rosada a la Fuerza Aérea Argentina.
Esta decisión, según fuentes gubernamentales consultadas por El Cronista, tiene como objetivo principal reducir los costos operativos asociados con el mantenimiento y uso de los aviones estatales. Se estima que el gasto anual de mantenimiento del Tango 04 asciende a alrededor de $1.7 millones de dólares, junto con costosas inspecciones periódicas.
El plan de Milei incluye también la evaluación de qué hacer con el resto de la flota presidencial, compuesta por el Tango 01 y el Learjet 60 (ARG-03). Por el momento, se ha confirmado la venta del Tango 04, mientras que el destino de las otras aeronaves aún está en discusión.
Además de la venta del avión presidencial, se ha decidido transferir el manejo logístico de toda la flota presidencial de la Casa Militar a la Fuerza Aérea. Aunque esta medida ha generado cierta tensión interna en el Gobierno, prevaleció la idea de centralizar el control operativo bajo una sola fuerza armada.
Esta reorganización no solo busca optimizar los recursos financieros, sino también simplificar la gestión logística y aumentar la eficiencia en el uso de los aviones estatales. Sin embargo, algunos sectores han expresado preocupación por la concentración de poder en la Fuerza Aérea, argumentando que podría ser excesivo otorgarle todo el control sobre la flota presidencial.
Con estos cambios, Milei marca un nuevo rumbo en la administración de los recursos estatales, priorizando la eficiencia y la racionalización del gasto público en línea con los principios del gobierno libertario.
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